Propuesta de reubicación de asentamientos humanos localizados en zonas de riesgo. Caso de estudio cabecera parroquial Cotaló, cantón San Pedro de Pelileo.

Abstract

Como resultado de un proceso de consolidación de asentamientos humanos mal controlado y de un contexto geodinámico desfavorable, la población de la parroquia rural Cotaló, cantón San Pedro de Pelileo, enfrenta de manera creciente los riesgos asociados a la actividad volcánica del Tungurahua. En los últimos años la actividad del Tungurahua ha desencadenado en desastres que afectan a la población, infraestructura, bienes públicos y privados y a la economía de la parroquia; en suma, a las condiciones de su desarrollo. Fuera de cualquier consideración con respecto a vulnerabilidades y riesgos, como consecuencia de la pobreza, la exclusión social y la segregación espacial, la población de la parroquia sigue creciendo, provocando una extensión del área urbana en zona de riesgo e intensificando las condiciones de vulnerabilidad, que se traducen en una historia marcada por errores, intereses particulares e informalidad en materia de gestión del riesgo de desastres, planificación territorial y un sistema de gobernabilidad que no prioriza la solución de problemas en torno a los asentamientos humanos localizados en zonas de alto riesgo. Debido al incremento de la actividad volcánica del Tungurahua y de los daños y pérdidas asociados, en el año 2008 las autoridades nacionales competentes establecen una propuesta de reasentamiento para 56 familias localizadas en zonas de alto riesgo de la parroquia Cotaló. Sin embargo, la propuesta de reasentamiento ejecutada, no ha tenido la aceptación de los habitantes debido a su planificación espontánea, y en la actualidad el proyecto es utilizado como refugio temporal. Es necesario ejecutar una propuesta técnica de reubicación de poblaciones localizadas en zonas de alto riesgo, como una estrategia enfocada a la reducción del riesgo de desastres por medio de la reducción de la exposición a la amenaza, de la vulnerabilidad de las personas y de la infraestructura, y el fortalecimiento de las instituciones para una adecuada gestión del riesgo, planificación territorial y ordenamiento territorial. Además, la propuesta de reasentamiento debe ser planificada y orientada a promover el desarrollo local de la población en riesgo, disminuir su vulnerabilidad y construir una cultura de prevención del riesgo desde la comunidad.