Resumen:
La estrategia territorial nacional en el contexto del Plan Nacional del Buen Vivir 2013 – 2017, está sustentada en la Constitución 2008 del Ecuador, la que impulsó cambios profundos de visión y política del país, teniendo como base: el retorno del Estado a la participación ciudadana, el reconocimiento de los derechos sociales y ancestrales, el mejoramiento no solo de la calidad de vida, sino el proponer un desarrollo local sostenible.
Se determina que la naturaleza tiene derechos y define la importancia de los procesos de planificación participativa. Territorialmente rompe el esquema de bicefalia de los polos de desarrollo Quito y Guayaquil y plantea un análisis integral mediante el establecimiento por parte del Estado de unidades de síntesis desde la sustentabilidad ambiental, asentamientos humanos, cambio de la matriz productiva y reducción de brechas para lograr la institucionalidad del Estado mediante la construcción social.
El Sumak Kawsay promueve de manera integral la superación de desigualdades, la redistribución de los recursos, la descentralización y desconcentración de lo local, y genera modelos basado en las potencialidades del territorio, la realidad socio - económica, lo cultural, basado en derechos, que permitan lograr un modelo de ordenamiento territorial del Estado policéntrico, articulado y sinérgico.