Resumen:
El Sumak Kawsai o Buen Vivir es un término perteneciente a la cosmovisión indígena kichwa
que ha sido incorporado a las políticas actuales del estado ecuatoriano como un nuevo
horizonte de su accionar, significando un reto a la forma de concebir el desarrollo y como
una necesidad para construir otras formas de superar la pobreza, las desigualdades y las
injusticias. Los modelos de desarrollo implementados no han permitido superar del todo las
problemáticas que prometió atender, incluso se han encrudecido aun más; los lugares
marginales que en este sentido se generan pueden considerarse el sitio mismo donde poder
encontrar soluciones más efectivas para trazar caminos en la búsqueda del buen vivir, en el
horizonte de un porvenir compartido, tal y como lo establece el documento de SENPLADES
al referirse al Plan Nacional de Desarrollo:
… que considera al desarrollo que privilegia la consecución del buen vivir, que presupone
la ampliación de las libertades, oportunidades y potencialidades de los seres humanos y el
reconocimiento de unos a otros para alcanzar un porvenir compartido. Considera además
que la pobreza, la desigualdad y la exclusión social constituyen barreras para el
desarrollo, pues impiden el acceso de los individuos a un conjunto de bienes y servicios
claves para su plena realización. …la planificación nacional por objetivos, la articulación
con lo territorial, el enfoque de derechos y los ejes transversales como género, ambiente,
intergeneración e interculturalidad, y la vinculación entre lo político, lo técnico y la
participación ciudadana, estructuran al Plan Nacional de Desarrollo del Ecuador
(SENPLADES, 2008).
Existen particularidades del territorio que podrían fomentar una innovación en las políticas
estatales para alcanzar el buen vivir, como las que se han observado en los últimos años en
unidades territoriales cuya población es mayoritariamente femenina1 o cuyas organizaciones
de base de mujeres han logrado cambios en la configuración socio-política